151.- XXXV aniversario de la restablecimiento de
relaciones diplomáticas México- España.
Ángel Rafael Martínez
Alarcón.
El pasado 28 de marzo, se
conmemoro el 35 aniversario del restablecimiento de relaciones diplomáticas entre el Estado
Mexicano y la Corona Española. Luego de
38 años de haberse fracturado, con motivo del triunfo del bando nacionalista,
encabezado por el General Francisco Franco (1892-1975); entre los años de 1936
a 1939, la República Española, vivió una de las más cruentas guerras civiles
del siglo XX.
La lucha de dos bandos: republicanos y los nacionalistas. Hay
que recordar los Republicanos ganaron
las elecciones generales de 1931. Para algunos historiadores la Guerra Civil
Española, fue el ensayo general para la Segunda Guerra Mundial por los años de 1939 a 1945.
Los Gobiernos de la Revolución
Mexicana, saludaron y apoyaron a la
República Española, en particular el gobierno del Presidente Lázaro Cárdenas del
Rio, así también el gobierno de José Stalin, jefe máximo de la Revolución
Bolchevique, extendieron la solidaridad soviética al pueblo ibérico.
El bando Nacional tuvo su mejor
aliado a la Iglesia Católica Apostólica, en particular la jerarquía, como también
apoyo moral y posteriormente material de la Italia de Benito Mussolini y la
Alemania de Adolfo Hitler. El 18 de
julio de 1936, el General más joven de Europa, Francisco Franco, encabeza la cruzada para derrotar al Gobierno
de la Segunda República; iniciando la guerra civil, que duraría cerca de tres años, donde la comunidad
internacional se dividió apoyando a los diferentes bandos en pugna. El General
Lázaro Cárdenas tuvo una determinación firma en apoyar al bando Republicano.
Como lo narra Carlos Fuentes, en su novela: La muerte de Artemio Cruz. Para abril de
1939, el bando nacionalista gana la guerra. Es entonces que el gobierno de
México retira a su embajador, el veracruzano y ex gobernador del Estado, el
coronel Adalberto Tejeda Olivares, pero sin dejar de apoyar al bando Republicano, muestra de ello fue
exiliar a la intelectualidad repúblicana, y el caso más reseñado fue de los
niños huérfanos de la Guerra.
Las relaciones del Estado
Mexicano con España, no fueron nada fácil. La monarquía ibérica y Roma, reconocen a la recién funda
república de México, en el años de 1836; con intercambios de embajadas y todo
lo relativo del intercambio entre ambas naciones, a pesar de existir un pasado
común por espacio de 300 años. Hace 150 años, España, Francia e Inglaterra
colocaron al gobierno del Presidente Benito Juárez en una complicada situación
política, logrando la declaración de la moratoria al pago de la deuda externa,
ante la posibilidad de la invasión militar. Durante el porfiriato las
relaciones diplomáticas entre México y
España estuvieron en un excelente nivel. En 1913, en embajador español es
obligado por el embajador Norteamericano para exigir la renuncia o exilio del
Presidente Francisco I Madero. El dictador Victoria Huerta, es reconocido por el
rey Alfonso XII. Con el triunfo del constitucionalismo al mando de Venustiano
Carranza, en 1915, el gobierno de España reconoce a la nueva realidad política
de México. Basta recordar que la elite porfirista derrotada en 1911, no
encontró mejor exilio que la capital del reino, Madrid. Hasta el día de hoy sus
descendiste se dan cita en los espacios culturales y políticas en la ciudad de
Madrid. El Presidente Manuel Ávila Camacho, dio refugio al Gobierno de la
Segunda República. Los asuntos del gobierno de México, fueron atendidos por la
representación diplomática de Portugal. Las relaciones entre ambos pueblos no
se vio interrumpida de ida o vuela, quedando bien claro la postura de los
gobierno. Para el 20 de noviembre de
1975, fallece el Generalísimo Francisco Franco, Jefe del Estado Español, por
Gracia de Dios.
El sucesor del Caudillo de
España, desde 1969, fue el Príncipe de Asturias, Juan Carlos de Borbón, una nueva era se
iniciaba para la península ibérica, una de ella fue el reanudar los vínculos
diplomáticos con México, el gobierno del presidente José López Portillo y
Pacheco, junto con su Secretario de Relaciones Exteriores, Jorge Castañeda, dieron paso a reconocer la
necesidad de mantener las relaciones entre ambos gobierno. El Gobierno de
México, tuvo a bien designar como su embajador Gustavo Díaz Ordaz, ex
presidente de México de 1964 a 1970, quien es el responsable de la matanza
estudiantil del 2 de octubre de 1968, su
designación provoco polémica en México
como España.
Cabe destacar que en Madrid, unos
de los protagonistas de mantener viva las relaciones políticas, culturales,
sociales y académicas entre México y España, es el Dr. Pedro Pérez Herrero,
historiador, miembro de la Academia de la Historia, y desde sus espacios
académicos, primero en la Universidad Complutense de Madrid y actualmente en la
Universidad de Alcalá de Henares; quienes hemos sido sus alumnos reconocemos su
pasión y amor de México. Para la clase política mexicana, pasar por el
seminario permanente de México, es la pasarela para palpar la realidad mexicana
desde exterior.
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