Justo F. Fernández López, el rey Midas veracruzano.
Ángel Rafael Martínez
Alarcón.
La historia de nuestra ciudad de
Xalapa durante el pasado siglo XX, no se puede explicar sin contar con la actividad empresarial, cultural y de
benefactor de don Justo Félix Fernández López (1914-2002). Ciudad a la que
siempre amo, apoyó para hacerla una capital digna de la grandeza del Estado de
Veracruz.
En mi niñez escuchaba siempre que cuando mis mayores hacían
referencia a hacia don Justo Fernández, tanto padre como hijo siempre lo hacían
con todo el respeto; y creciendo con las lecturas de la prensa local Diario de
Xalapa, el Tema de Hoy, siempre que había una nota sobre alguna declaración o
fotografía de don Justo F. Fernández
López, pensaba yo que era un señor más importante que el propio gobernador, eran los últimos años del
licenciado Rafael Murillo Vidal. Más me impacto al leer los apuntes del
Presidente Lázaro Cárdenas del Ríos, hace una referencia de don Justo, así como
un par de biografías de intelectuales mexicanos que hacen también referencia a
la labor cultural de don Justo Fernández López. Hasta el día de hoy encontramos
una serie de edificios públicos y privados donde se deja testimonio de la labor
benefactora en la ciudad de Xalapa. Los Justo Fernández, padre e hijo se
convirtieron en leyendas vivientes en las ciudades de Xalapa y Coatepec,
gracias al emporio empresarial del café. Era más que urgente tener un acercamiento biográfico de Justo F. Fernández
López, quién no nació con una estrella, sino más bien con todo el sistema
planetario; y sobre todo su servicio a Xalapa y
estado mexicano.
Campos Rafael. 2010.
Justo como fue. Justo F. Fernández López. Editorial Las Ánimas,
Xalapa. 274 pp. En cuatro extraordinarios capítulos se narra la
historia del empresario Justo F. Fernández, desde sus antepasados en la
Asturias hasta sus desdientes directos trabajando en engrandecimiento del
estado de Veracruz. Cada una de las líneas escritas en dicha biografía hay un
excelente cuidado, y sobre todo una calidad afectivo. Cabe destacar que el
libro cuenta con una extraordinaria
fotografía. Desde los cafetales en la zona de Coatepec, sus relaciones
con los más diversos presidentes de la republica, hasta con los Reyes de España,
todos los fondos fotográficos pertenecientes a los archivos: Fernández
Chedraui. Donde la imagen también nos aporta muchas pistas del México del siglo
XX. En la lectura nos encontramos con una sorpresa el árbol genealógico de la familia Fernández nos lleva
hasta el siglo XVI, si la España de Felipe II, iniciando en el año 1569. No es
la biografía de un solo hombre sino de una colectividad llamada La Hacienda de
las Animas en manos de la familia Fernández desde 1919; misma que desde 1976,
ha contribuido al desarrollo urbano de la ciudad de Xalapa. Una fortuna del
trabajo de una férrea voluntad de padre e hijo, los Fernández; gracias al
cultivo y exportación a nivel mundial del café. Justo F. Fernández también fue
un extraordinario creador del Caballo, dicha actividad que años más tarde le
conducen a dirigir el hipódromo de las Américas en la ciudad de México. Su
enlace matrimonial con la señorita Alicia Ávila Camacho Richardi en 1940, hija
del Gobernador de Puebla, el General Maximino Ávila Camacho, y del Presidente de
la República don Manuel Ávila Camacho. El matrimonio Fernández Ávila,
procrearon a Justo, Maximino, Manuel, Alejandro, Carlos Rodrigo y Maximino
Alejandro, todos ellos han respondido al legado de sus padres, destacándose
cada uno de ellos en la vida empresaria, y política. La importancia durante
toda la vida de don Justo fue sin duda alguna si distinguida esposa doña
Alicia, cariñosamente llamada por sus cercanos
como doña Licha; me impacto
conocer que entre muchas otras actividades fue la precursora de los desayunos
escolares para los hijos de lo empleado de la hacienda Las Animas. Dicho
proyecto es copiado por la Sra. Eva Sámano de López Mateos lo que conocemos
como los desayunos escolares del DIF (Campos, 2010:83)
La Universidad Veracruzana
también tiene una deuda con don Justo Félix Fernández López, durante su gestión como
presidente de la junta de mejoras del H. Ayuntamiento de Xalapa, la zona
universitario recibió todo el apoyo por parte del gobierno federal del
licenciado Adolfo López Mateos, el Rector Gonzalo Aguirre Beltrán y de don
Justo F. Fernández López.
Es admirable como don Justo F.
Fernández tuvo el don de ser todo un político sin necesidad de pasar por las
urnas electorales. Siempre dio los mejores resultados y sobre todo supo
transparentar los recursos públicos a favor de sus conciudadanos. Estimado
lector la lectura de dicha obra es más que urgente conocer la vida y obra de
unos de los empresarios más importante de Veracruz, en varias de las ciudades
del estado encontramos la huella de don Justo.
http://www.labamba.com.mx/?p=12108
No hay comentarios:
Publicar un comentario